Taller Paseos de calidad para tutores


Taller dirigido a todas las personas interesadas en mejorar sustancialmente los paseos de sus perros
Objetivo: Prevenir o resolver dificultades que se presentan comúnmente en el paseo con el perro por medio de estrategias respetuosas libres de miedo, dolor o incomodidad.
Contenido:
Parte teórica:
Porque no empleamos los términos "dueños" y "mascotas"
Las necesidades del perro según la edad o condición
La perspectiva del perro durante el paseo (los sentidos)
El papel del tutor durante el paseo
Las herrramientas de paseo
Planificar el paseo es más fácil de lo que parece
Contenido:
Parte práctica:
El antes del paseo: estado emocional, planificación de la ruta, colocación del arnés o pechera y correa.
La seguridad ante todo: manejo de la correa.
Las elecciones del perro.
Monitoreo del estado emocional y los estímulos ambientales.
Interacciones con perros y personas extrañas.


1. Porque no empleamos los términos "dueños" y "mascotas"
Cada vez son más las personas que consideran a sus perros miembros de la familia y por eso, en la Escuela del Perro cuidamos las expresiones utilizadas en nuestros servicios.
Nos pone felices darnos cuenta que la gente se preocupa cada vez más por el bienestar de su perro e invierte tiempo y recursos en mejorar su calidad de vida.
Contrastando con las costumbres e ideologías de otra época, en donde el perro era tratado como objeto y las personas justificaban el maltrato argumentando que era de ellos y que podía hacer lo que quisieran, ahora las leyes los protegen.
Han dejado de ser "cosas" y han pasado a la categoría de "seres sintieses", por lo que la gente también cambia su estatus a cuidador o tutor que es como preferimos referirnos a ustedes.


2: Las necesidades del perro


¿Qué es una necesidad?
Según la RAE se define como "carencia de algo que es menester para la conservación de la vida o para la satisfacción de un deseo o impulso".
¿Cuáles son las necesidades del perro?
El equipo del Cisne Negro, un grupo de profesionales dedicados a la investigación, difusión y cuidado del bienestar canino ha creado un modelo de las necesidades del perro representadas en con la forma de un árbol y sus raíces. Se requiere de una serie de cumplir una serie de condiciones para mantener la forma y el equilibrio integral.
¿Se cumplen satisfactoriamente en tu perro?
Apego adecuado
Entorno seguro y estimulante
Adecuadas relaciones familiares
Bienestar físico
Necesidades individuales
Experiencias sociales
Equilibrio emocional
Autocontrol
Autoeficiencia
Autoestima
Autoconfianza
Si respondiste afirmativamente, el paseo con tu perro será siempre una experiencia gratificante para ti y para él.
Las necesidades del cachorro


Un perro es considerado cachorro desde el nacimiento, pero pasa por diferentes fases de este periodo de su desarrollo y en cada una se observan cambios fisiológicos, sensoriales, físicos y emocionales.
La información relacionada con los primeros 3 meses lo reservaremos para otro taller dedicado a los cachorros y pasaremos a la etapa de los 4 meses en donde inicia un proceso de aprendizaje de socialización con otras especies.
La mayoría de los perros adquiridos entre los 2 y 3 meses requieren de completar un cuadro de vacunación para preservar su salud física, sin embargo esto no impide que el cachorro pueda salir en brazos, en el auto o en una bolsa cómoda para transportarlo y presentarle progresivamente el mundo exterior.
Conviene ir poco a poco en este proceso y se familiarice con los ruidos, olores, sonidos y movimiento de las zonas cercanas a su hogar. Que observe personas y perros cuidando que a las primeras señales de temor, se interrumpa la salida y se le lleve dentro.
Periodo juvenil


Entre los 3 a 6 meses se logra una maduración de la motricidad completa, incrementando la fuerza y la coordinación.
Los paseos comenzarán a ser más ágiles y el interés por la interacción con perros y personas extrañas podría aumentar en los casos de jóvenes extrovertidos.
Si todo ha transcurrido con normalidad, aumentará la conducta exploratoria aunque también está presente un periodo de temores ante lo desconocido que podrían superar fácilmente si se le presta atención y se le brinda apoyo al nivel que lo necesite.
Por ejemplo el movimiento de un objeto en el ambiente como una bolsa de basura, una motocicleta cubierta por una funda, la presencia de algo grande como una caja o bote lo puede inquietar y muchas veces basta esperar un par de segundos a que se recupere de la sorpresa, hablarle tranquilamente y no forzarlo a acercarse permite que se supere la situación y aprenda de la experiencia.
En estas edades es importante mantener la estructura de las actividades del día a día y mantener una comunicación amable, respetuosa pero a la vez firme con el perro para evitar que desarrolle hábitos inapropiados de conducta social.
Adolescencia canina


Muchas personas consideran que una vez que su perro cumplió su primer año, es considerado adulto pero en realidad no es así.
Aún faltan por completarse procesos neurológicos y físicos para llegar a la maduración.
Se considera a un perro adolescente, aquel que se encuentra entre los 6 meses hasta los dos años, momento el que termina de desarrollarse el cerebro de manera completa.
Será el momento más complicado para muchas familias pues se presenta la maduración sexual y comienzan comportamientos de búsqueda activa para la reproducción, conductas rebeldes y hostiles debido a procesos hormonales y se recomienda evitar castrar tanto a machos como a hembras para evitar fijar conductas relacionadas con estos fenómenos, principalmente a las hembras.
En esta etapa se observará una consolidación de carácter y estilo de afrontamiento a situaciones estresantes.
El perro adulto


Este periodo se encuentra entre los 2 y los 8 años de edad. Se trata de una etapa de mayor estabilidad y de comportamientos predecibles. Es el momento ideal para trabajar entrenamientos pues la corteza prefrontal del cerebro se ha desarrollado completamente y el perro puede procesar mejor las expectativas y moderar la impulsividad.
Los paseos poco a poco comenzarán a ser más tranquilos y con menos interés por la interacción cercana a diferencia de la adolescencia canina.
Tienen una mejor tolerancia a la frustración y todas estas cualidades dependerán en gran medida de la suma de experiencias positivas en etapas previas, buenos cuidados y sobre todo del papel del tutor como figura de apoyo.
El perro senior


El perro que ha cumplido 8 años, ha llegado a un momento importante de su vida, pues ya es considerado mayor y se notarán cambios progresivos en sus habilidades mentales, emocionales y motoras.
Se requiere tener más cuidado en el tiempo y rutas de paseo para evitar generar desgastes inapropiados de las articulaciones, así como sobre exponerlo a estímulos que podrían ser poco poco molestos por la degeneración de su sistema nervioso.
Muchas personas deciden adoptar un perro joven o cachorro cuando tienen uno senior en casa y es casi siempre una terrible experiencia para ambos, pues el recién llegado va a querer jugar con el adulto y este no tendrá el ánimo ni el interés; esto casi siempre termina en tensión y conflicto.
En resumen sobre este apartado, conviene tomar en cuenta el grado de maduración, nivel de energía y capacidades físicas, mentales y emocionales de cada etapa de desarrollo del perro, para considerar las condiciones ideales para brindar el paseo.
3: Los sentidos del perro
Los sentidos del perro informan al cerebro de los cambios en el ambiente y también dentro de su cuerpo.
Esta capacidad es denominada "sensopercepción" o también se conoce como "integración sensorial" y consiste en el intercambio entre las células especializadas en recibir los estímulos internos y externos, procesarlos, darles un significado y almacenarlos en la memoria.
Enlistamos a continuación cada uno:


El olfato
Se trata del sentido más importante al ser altamente sensible y dominantes en la especie canina. Sus funciones son la territorialidad, conductas reproductivas, depredadoras y el análisis del ambiente
Audición
Puede detectar sonidos en distancias hasta 4 veces mayores que los humanos; sus funciones son la comunicación, la caza y sobre todo la anticipación de amenazas.
Visión
Su alcance es en un ángulo de 240º (en humanos es de 180º). Capta principalmente tonalidades azules y amarillas. Altamente sensible al movimiento y sobre todo a distancia. Sus principales funciones son la caza, la comunicación y vigilancia.
Gusto
La sensibilidad es menor que en humanos, siendo mayor la predilección por las grasas y menos atractivos los sabores salados ya que el sodio se obtiene principalmente de las presas.
Tacto
En la piel se encuentran células mecanorreceptoras, termorreceptoras y vibrisas, éstas últimas en las zonas más sensibles (ojos y hocico) patas y parte de la cola. La manipulación puede ser placentera o displacentera. Al acariciar a tu perro considera el principio de las "3 P": la caricia debe ser predecible, permitida y placentera
Propiocepción
Es el sentido que permite la conciencia corporal facilitando el equilibrio, la locomoción, sensibilidad vestibular y la termorrecepción.
4: Perspectiva del perro durante el paseo
Muchas personas consideran más importante la actividad física de alto impacto con la idea de que necesitan cansar a su perro, como estrategia para disminuir conductas inapropiadas.
Lo más común es observar que la gente acostumbra aventarle una pelota repetidamente, causando liberación de adrenalina y cortisol en el cuerpo de manera totalmente innecesaria y perjudicial. Otro caso es llevarlos atados a una correa mientras la persona se traslada en bicicleta o va corriendo
En realidad tomando en cuenta los estudios realizados en perros en vida libre, se tiene que el ellos realizan actividades en el siguiente orden:
50% al 70% al descanso
10% al 20% a la exploración
8% al 15% a la búsqueda de alimento
2% al 10% a las interacciones sociales
1% al 3% al autocuidado
1% al 5% a otras conductas
Situaciones que pueden afectar el estado emocional de tu perro durante el paseo
Como se mencionó anteriormente la costumbre de las personas de provocar cansancio físico al pero puede resultar contraproducente. Aquí mostramos una lista de situaciones que provocarían que el paseo genere estados de malestar y que son totalmente evitables:
Dar órdenes constantes
Juegos físicos no estructurados
Forzar interacciones
Exponer al perro en ambientes que rebasan sus capacidades
Jalones de correa que provocan miedo y dolor al perro
En resumen para este apartado recomendamos tomar en cuenta las actividades caninas que realizan los perros en vida libre y permitirlas en las medidas necesarias durante el paseo con tu perro.
5: Las herramientas y utensilios para el paseo
Para facilitar a tu perro realizar las actividades que haría si tuviera un mayor nivel de libertad para el paseo y cuidando la seguridad sugerimos emplear un arnés cómodo ligero y no restrictivo. Sugerimos también aprender a utilizar una correa larga (no retráctil) de mínimo tres metros.
El perro experimentará un mejor estado emocional al tener la posibilidad de elegir que zonas inspeccionar, marcar o evitar sin necesidad de que sigas su ritmo.
Los collares no se recomiendan para llevarlos a la correa porque cuando hay tensión dificulta la respiración al presionar la tráquea, además obstruye el paso del oxígeno al cerebro sin mencionar que en el cuello se encuentran las cervicales y un tirón fuerte puede provocar lesiones delicadas.
Si el perro tiene dificultades emocionales que producen reactividad o agresividad, es mejor atender el problema con un profesional que esté capacitado en métodos respetuosos libres de castigo, miedo o incomodidad.
Los otros elementos que recomendamos llevar siempre durante el paseo, son bolsas para recoger las heces y de preferencia no fijarlas en el extremo de la correa para poder tener un manejo más libre y sin obstáculos. Tampoco es cómodo llevarlas sujetas al arnés del perro pues representan un estímulo más que puede incomodar o distraer al perro de su actividad.
Por último también pensamos que es buena idea levar un porta premios y tenerlos como una opción para negociar cuando recogen algo del piso, para llamar al perro y tener una respuesta rápida o incluso si se presenta algún perro suelto y desconfíes de sus intenciones, puedes arrojarle a distancia una cantidad que para él sea visible y se ocupe de buscarlos y comerlos mientras te alejas por seguridad.